Nos cuenta, qué era lo que hacia fuerte al equipo, y que le dejó el pasaje por nuestra institución.
-¿Cómo fueron tus comienzos en el fútbol?
Empecé jugando en Aguas Corrientes en la liga de Canelones en el año 1988 estuve 2 años, ahí jugué en la selección juvenil de mi departamento y logre salir Campeón del Sur en el año 89. De ahí me vienen a buscar de Wanderers y luego de 2 años en Tercera división logro debutar en primera. En el 94 defiendo a Uruguay en un Torneo Sudamericano disputado en Colombia saliendo Vice Campeón. En el 95 me lesione la rodilla donde estuve tiempo inactivo y quedo libre al año siguiente. En el 97 juego en Villa Española donde conseguimos por primera vez el ascenso a primera división y sufro mi segunda gran lesión fractura de escafoides en mi mano derecha donde estoy 1 año recuperandome después de una operación.
-¿Cómo llegaste al equipo de Nuevo París?
En el año 98 el Profe Lizarazu que lo había tenido como entrenador en Villa Española, me arrima a Salus donde ayudó a entrenar a los goleros, ya al año siguiente recuperado de mi lesión integro ese gran plantel que consiguió el titulo.
Lo que sin lugar a dudas hacia fuerte al equipo era la humildad y las ganas que teníamos todos de progresar y fundamentalmente el vestuario ahí donde se forman los grandes grupos. También tenemos que reconocer que teníamos un equipazo y todos desde el lugar que nos correspondía, tirábamos para el mismo lado desde jugadores dirigentes, técnicos e hinchas.
Pienso que el partido que fue clave es el que le ganamos a Racing 2 a 0 en el Parque Viera, ahí nos dimos cuenta que no era imposible lograr el objetivo.
Si me sirvió y mucho ya que ese año me eligieron por el diario El País como el mejor jugador de la B, recibiendo el premio en el Hotel Conrad de Punta del Este, acompañado por Rodney Fabricio y Walter Lecuona.
-¿Actualmente seguís vinculado al fútbol?
Actualmente abandone; hasta el año pasado estuve jugando a nivel amateur en Valdense departamento de Colonia logrando un Tetra campeonato.
A Nivel deportivo lograr un titulo con una institución tan humilde, donde ves llorar a la gente del barrio, donde sus dirigentes son hinchas del club y donde sus jugadores llegan al objetivo soñado, son de las cosas mas lindas que me han pasado en mi carrera deportiva.
En lo humano me dejó la vivencia de compartir cosas maravillosas con grandes compañeros y 2 grandes amigos, que gracias a Dios conservo hasta el día de hoy, como son Marcelo Almiñana (Archi) y Gustavo Cubiella (Hueso) donde soy el padrino de Ariadna unas de sus hijas.
-¿El regreso de Salus a la competición se ha hecho esperar?
Me encantaría poder ver a Salus un sábado de tarde por televisión.
Agradecemos a Mauricio y a su familia.
Próximamente más entrevistas...