
De más está decir, lo bien y rico que quedo el primer asado en dicha parrila, por más que en toda familia siempre hay gustos distintos sobre si la carne es más rica jugosa o bien sequita.
Un momento muy ameno y divertido, aprovechando la ocasión para charlar con vecinos y amigos, como siempre ocurre, terminar hablando sobre hechos, aconteceres y anecdotas del pasado, presente y futuro de la institución. El viejo y querido Salus, que suma una perlita más, para cuando UD., socio o no socio desee contar con los servicios del club tenga un parrillero acorde a las circunstancias.